viernes, 20 de julio de 2007

EL KYBALION

LOS SIETE PRINCIPIOS HERMETICOS

"Los principios de la verdad son siete:
el que comprende esto perfectamente posee
la clave mágica ante la cual todas las puertas
del Templo se abrirán de par en par".
Los siete principios sobre los que se basa toda la Filosofía Hermética son los siguientes:

1. El principio de Mentalismo
2. El principio de Correspondencia
3. El principio de Vibración
4. El principio de Polaridad
5. El principio de Ritmo
6. El principio de Causa y Efecto
7. El principio de Generación

1. EL PRINCIPIO DEL MENTALISMO

"El TODO es Mente; el universo es mental".
EL KYBALION
Este principio encierra la verdad de que "todo es mente". Explica que el TODO, que es la realidad sustancial que se oculta detrás de todas las manifestaciones y apariencias que conocemos bajo los nombres de "universo material", "fenómenos de la vida", "materia", "energía", etc., y en una palabra, todo cuanto es sensible a nuestros sentidos materiales, es espíritu, quien en sí mismo es incognoscible e indefinible, pero que puede ser considerado como una mente infinita, universal y viviente. Explica también que todo el mundo fenomenal o universo es una creación mental del TODO en cuya mente vivimos, nos movemos y tenemos nuestro ser. Este principio, al establecer la naturaleza mental del universo, explica fácilmente los varios fenómenos mentales y psíquicos que tanto han preocupado la atención del público, y que sin tal explicación no son comprensibles y desafían toda hipótesis científica. La comprensión de este principio hermético de mentalismo habilita al individuo a realizar y conocer la ley que rige el universo mental, aplicándola a su bienestar y desarrollo. Este principio explica la verdadera naturaleza de la energía, de la fuerza y de la materia, y el cómo y el porqué todas estas están subordinadas al dominio de la mente. Uno de los antiguos Maestros escribió, largo tiempo ha: " El que comprenda la verdad de que el universo es mental, esta muy avanzado en el sendero del adepto". Y estas palabras son tan verdad hoy en día como lo eran cuando fueron escritas. Sin esta clave maestra el adeptado es imposible, y el estudiante que no lo posea, en vano llamará a la puerta del Templo.
.
.
2. EL PRINCIPIO DE CORRESPONDENCIA
.
" Como arriba es abajo; como abajo es arriba".
EL KYBALION
El principio encierra la verdad de que hay siempre una cierta correspondencia entre las leyes y los fenómenos de los estados de los varios estados del ser y de la vida, y el antiquísimo axioma hermético se refiere precisamente a esto, y afirma: "Como arriba es abajo; como abajo es arriba", y la comprensión de este principio da una clave para resolver muchos de los más oscuros problemas y paradojas de los misteriosos secretos de la Naturaleza. Hay muchos planos que no conocemos, pero cuando aplicamos esa ley de correspondencia a ellos, mucho de lo que de otra manera nos sería incomprensible se hace claro a nuestra conciencia. Este principio es de aplicación universal en los diversos planos, mental, material o espiritual del Kosmos: es una ley universal. Los antiguos hermetistas consideraban este principio como uno de los más importantes auxiliares de la mente, por cuyo intermedio se puede descorrer el velo que oculta lo desconocido a nuestra vista. Su aplicación puede desgarrar un tanto del Velo de Isis, de tal manera que nos permita ver, aunque más no sea, algunos de los rasgos de la diosa. De igual manera que el conocer los principios de la geometría habilita al hombre para medir el diámetro, órbita y movimiento de las más lejanas estrellas, mientras permanece sentado en su observatorio, así también el conocimiento del principio de correspondencia habilita al hombre a razonar inteligentemente de lo conocido a lo desconocido; estudiando la mónada se llega a comprender al arcángel.
.
.
3. EL PRINCIPIO DE VIBRACIÓN
.
"Nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra".
EL KYBALION
Este principio encierra la verdad de que todo esta en movimiento, de que nada permanece inmóvil, cosas ambas que confirma por su parte la ciencia moderna, y cada nuevo descubrimiento lo verifica y comprueba. Y, a pesar de todo, este principio hermético fue enunciado cientos de años ha por los Maestros del antiguo Egipto. Este principio explica las diferencias entre las diversas manifestaciones de la materia, de la fuerza, de la mente y aun del mismo espíritu, hasta la más grosera forma de materia, todo esta en vibración: cuanto más alta es esta, tanto más elevada es su posición en la escala. La vibración del espíritu es de una intensidad infinita; tanto, que prácticamente puede considerarse como si estuviera en reposo, de igual manera que una rueda que gira rapidísimamente parece que está sin movimiento. Y en el otro extremo de la escala hay formas de materia densísima, cuya vibración es tan débil que parece también estar en reposo. Entre ambos polos hay millones de millones de grados de intensidad vibratoria. Desde el corpúsculo y el electrón, desde el átomo y la molécula hasta el astro y los universos, todo está en vibración. Y esto es igualmente cierto en lo que respecta a los estados o planos de la energía o fuerza (la que no es más que un determinado estado vibratorio), y a los planos mentales y espirituales. Una perfecta comprensión de este principio habilita al estudiante hermético a controlar sus propias vibraciones mentales, así como las de los demás. Los Maestros también emplean este principio para conquistar los fenómenos naturales. "El que comprenda el principio vibratorio ha alcanzado el cetro del poder", ha dicho uno de los más antiguos escritores.

No hay comentarios: